miércoles, 30 de junio de 2010

Comentarios dirigidos y enviados a la Diputada Diana Maffía -30/06/10

Dra. Maffía,
Tuve la oportunidad de ver parcialmente la transmisión —sólo la última parte, cuando comenzaba el tramo de preguntas al orador— del encuentro abierto con Mario Bunge realizado en la Legislatura de Buenos Aires.

A su término, haciendo uso de mi escaso bagaje lógico, me quedé relacionando dos de las preguntas lanzadas. No retuve cuál fue el orden, pero no interesa en esta oportunidad.

Una era vinculada con Cuba, y recuerdo la respuesta del filósofo: desaprobó la tiranía, además de considerarla innecesaria, ya que si hubiese elecciones todo el pueblo cubano apoyaría sin duda el sistema vigente. Y, por otro lado, reconoció la tarea realizada en educación y salud, que asegura el acceso a ellas al 100% de la población, así como también destacó que Cuba pasó de ser una economía basada en el juego-prostitución-turismo a otra orientada hacia el desarrollo técnico-científico.

La otra pregunta en cuestión era, en realidad, un pedido de que expusiera su opinión sobre la legalización de las drogas. Bunge afirmó que la criminalización da lugar a las mafias. Si no me equivoco, pareció plantear un esquema de causa y efecto. Sin embargo, en Cuba está criminalizado el tráfico, la comercialización y la tenencia, y no hay mafia.

Hizo referencia a Holanda y a Suecia como dos países modelos, pero Holanda debió dar marcha atrás en su política liberal de años atrás por el costo en vidas que ésta ocasionó oportunamente, y Suecia, por su parte, tiene casos de tráfico de drogas que, más allá de la mayor tolerancia jurídica, se originan en la formación de lo que se conoce como mercados paralelos o mercado negro.

Cuba, Holanda y Suecia son países que le garantizan a su población una cobertura en salud. Lo aclaro, porque creo que de eso nos debiéramos de estar ocupando en nuestro país, junto con la educación. Y no de la legalización de las drogas.

Lamento que hayan expuesto a Bunge, cuyos aportes son muy valiosos en otras esferas del pensamiento, a opinar de algo que no parece haberse detenido a conocer. Espero que el ideólogo de tal consulta no haya sido nadie de su equipo asesor, y mucho menos usted misma, en quien vengo observando algo así como una “inocente” defensa de la despenalización de la tenencia, o en definitiva y a la larga, de la legalización, sin elaborados ni sólidos argumentos. Espero equivocarme en mis apreciaciones y, si no es así, será verdaderamente lamentable que sus condiciones vocales no le hayan permitido ser una cantante de jazz.

Pero me tranquiliza pensar que este pensamiento suyo favorable a la liberalización de las drogas es personal y, afortunadamente, entiendo no obedece a una posición generalizada en la Coalición Cívica.

Saluda a usted atentamente,

Viviana Sacco
Red de Madres y Familiares de Víctimas de las Drogas
Grupo Montserrat