viernes, 5 de noviembre de 2010

DESDE SALTA, MADRES SOLIDARIAS:


  • Principales factores que llevan a nuestros hijos al consumo de drogas:

    La falta de contención educacional
    es uno de los principales factores que llevan a nuestros hijos al consumo de droga o pegamento: las escuelas no están preparadas para contener a los niños ni a los adolescentes. Sin embargo, en Salta existe una ley desde el 2005 que nuestro gobernador no quiere poner en práctica, que establece que los maestros se deben capacitar en el tema y por ello reciben puntaje. Si se realizara realmente no sólo podrían ayudar con la prevención de las adicciones sino que también se podría crear un padrón para la asistencia.

    Las carencias en salud es una influencia también muy importante: no hay controles en los centros periféricos y los profesionales creen que son dueños de la estructura que existe en los barrios. Esto pasa tanto en los establecimientos de salud como en los educativos.

    La discriminación social y la falta de instituciones de contención barriales: La sociedad discrimina a los que viven en barrios pobres y asentamientos, somos considerados solamente como villeros que nos reproducimos. Nuestros adolescentes no tienen posibilidad de seguir un nivel terciario, el gobierno les da talleres de arte y oficio nada más. Tampoco existe contención barrial de recreación ni deportiva.

  • Dificultades para obtener apoyo judicial y gubernamental para internaciones y desintoxicaciones

    En Salta peregrinamos mucho, nos cuesta que nuestros hijos tengan el beneficio de la internación porque los jueces provinciales nos duermen los expedientes de pedidos de protección de persona a pesar que muchos de los chicos son menores y los padres no pueden hacer ejercicio de la patria potestad. Solamente manifestándonos frente a la secretaría ante los medios logramos que nos los internen, pero sin la desintoxicación necesaria para ir creando un paciente. Para colmo en la Secretaría de Adicciones no los quieren internar si no tienen voluntad, es algo imposible sacarlos del lugar que ellos entraron para enfrentar una realidad sin esperanzas.

  • Falta de voluntad política, infraestructura, elementos y profesionales:

    La Secretaría de Adicciones mandó una orden a los hospitales San Bernardo, Milagro y Ragones para que reciban y realicen desintoxicación, pero los gerentes nos mandaron un escrito donde piden que en lo posible no dejemos que deriven a nuestros hijos porque no cuentan con los profesionales adecuados, tampoco con medicamentos ni infraestructura, corriendo riesgo la vida de nuestros hijos y de los pacientes allí alojados. Solicitamos que dentro del hospital estatal CEPRI se realicen las desintoxicaciones pero no se logró todavía.

  • La organización de las madres surge de la necesidad de unirse para proteger a los hijos de los malos tratos policiales y de la falta de protección judicial

    MADRES SOLIDARIAS se originó porque muchas madres teníamos el problema de que nuestros hijos eran objeto de malos tratos en la comisaría del menor sin representación de los defensores. Dado que la mayoría de los problemas se originaban en las adicciones logramos que se implemente la ley 26061 y que los policías dejaran de maltratar a nuestros hijos. Hoy tenemos un equipo de guarda-cárcel y estamos peleando para que un equipo interdisciplinario nos apoye a las madres y nos guíe en la dura situación de reformular nuestras familias.

  • De la unión y del amor nace la fuerza:

    Tenemos la certeza de que únicamente a través de la unión, de ese fuerte lazo de confianza y de amor entre nosotras logramos de a poquito nuestros objetivos.


  • La pobreza atenta contra la comunicación en la familia, las instituciones no protegen:

    Todas somos madres de clase humilde, sentimos pena por tener que mandar a nuestros hijos a comedores comunitarios. De esa forma no tenemos tiempo para contarnos cosas y poder aconsejarlos, muchas trabajamos todo el día para llevar la comida, otras esperamos que el gobierno nos ayude con bolsones. Es una situación de negligencia que sobrepasa nuestros esfuerzos.

  • Buscando que la sociedad salteña tome conciencia de su responsabilidad, tratando de contrarrestar lo que dice el gobierno:

    El gobierno realiza campaña para mostrar que nuestros hijos son adictos por descuido nuestro, nosotras les hicimos ver a la sociedad que no es así, que el problema es de todos por una suma de factores que están instalados en esta sociedad salteña.


  • Obligar a las instituciones políticas, religiosas y de la sociedad civil a que se involucren:

    La Iglesia se mantenía neutral, pero el ministro fue a visitar al arzobispo y le propuso realizar nuestro proyecto en Potrero de Linares con convenios con organizaciones civiles nacionales e internacionales. El arzobispo quiere hacerlo con Fazenda de la Esperanza. Los comedores no saben cómo abordar el tema, las escuelas se mantienen con la política de expulsar al niño que no rinde, los partidos políticos tratan de utilizarnos en su lid eleccionaria, los centros vecinales trabajan con nosotras porque tienen muchos casos.


  • Hostilidad y desidia de las autoridades: unirse para comprometer y presionar

    Las autoridades nos ven como las enemigas, ya que no les permitimos las omisiones que quieren imponernos. Logramos que la mayoría de los diputados y de los concejales nos escriban individualmente su apoyo al proyecto de Potrero de Linares. Pero aún no se nos otorga el predio. Ahora le presentamos toda una carpeta para que analicen y tomen una decisión.

  • La falta de protección policial y de compromiso judicial lleva a la autogestión y a la lucha directa contra el narcotráfico, con los riesgos que implica:

    Realizamos denuncias a las bocas de expendio, estamos en los procedimientos y vemos que en menos de 24 hs. salen en libertad: nos persiguen, nos apedrean las casas, y los jueces desestiman nuestras denuncias.
    La policía no se quiere involucrar porque los jueces no mandan las órdenes.

  • Las campañas de concientización con repercusión mediática rinden frutos:

    Realizamos campaña de concientización y varios medios se sensibilizaron con nuestra causa. Cuando denunciamos a los jueces o a la policía nos llaman y nos escuchan para realizar su trabajo.

  • Solidaridad entre madres

    Nos reunimos en los barrios, donde acompañamos a las mamis que tienen que realizar denuncias para la atención de sus hijos.

    Estamos en permanente contacto con las madres de diferentes barrios, cuando se presenta un nuevo caso estamos allí, lamentablemente no podemos hacer campaña de prevención como nos gustaría porque no contamos con fondos.

  • Falta de prevención, algunos logros en rehabilitación pero aún con importantes carencias en desintoxicación, atención y control:

    Planteamos que se cree un centro de rehabilitación y lo realizaron para menores, hoy queremos que ese centro sea a puerta cerrada y que realicen desintoxicación, que controlen a los centros de las organizaciones para que realicen una terapia adecuada y que los contengan los fines de semana, que es cuando los peligros son más fuertes.

  • La despenalización implica complicidades con los vendedores de drogas

    No podemos permitir la impunidad de los vendedores que dicen ser consumidores. La ley de estupefacientes dice que un adicto debe ser tratado como tal y debe realizar una desintoxicación y la rehabilitación correspondiente, no le debemos dejar la vida de nuestros hijos al factor suerte o a los inescrupulosos que no les interesa.


  • La prevención no sólo debería ser dirigida a los jóvenes sino también a las familias, que necesitan informarse y fortalecerse para poder protegerlos:

    Una campaña de prevención que llegue no sólo a los jóvenes sino a nosotras las madres que muchas veces no sabemos cómo detectar el problema. También debe fortalecer al jefe de familia, para que sea como años antes, que sólo se temía a la oscuridad porque llegaba la noche y no porque los problemas tapan nuestra visibilidad.

  • Mensaje a todas las madres, tengan o no el problema de hijos con adicción:

    No parimos delincuentes ni drogadictos: son hijos que están necesitando de vos y de usted, aunque me tenga a mí.

    Marina Vega, presidente de la asociación MADRES SOLIDARIAS