jueves, 17 de mayo de 2012


¿Se Viene la Generación THC?

 

Sergio Barrera



La Fede repartió volantes, pegó afiches y mandó por todos los medios la imagen que adjunto abajo, ante el llamado mundial de una nueva marcha a favor de la Legalización de la Marihuana.
También pude leer una invitación de la Revista THC a la misma marcha. Algunos compañeros a título individual invitaban a ir y yo, también a título individual, quiero volver a decir lo que pienso, simplemente para que si a alguien le interesa se discuta en alguna reunión o asamblea de barrio.


En Mayo del 2011 escribí una nota que publicó Prensa de Frente (http://www.prensadefrente.org/pdfb2/index.php/a/2011/05/08/p6454 ).

Mis consideraciones alrededor de la necesidad de que discutamos la difusión del consumo de marihuana y otras drogas,  es en primer lugar política.

Pero también hay razones que tienen que ver con la salud de la sociedad que nos imaginamos y que tendríamos que empezar a prefigurar hoy -en la medida de lo posible-y por último lo que tiene que ver con -no sé como llamarlo para que no parezca rimbombante ni demodé- la integridad y la moral militante. Sí, ya sé, suena muy setentista esto, ¿no?. Mas viejo todavía, incluso de fines del siglo XIX o principios de siglo XX, de los relatos de los militantes anarquistas que escuchamos o leímos y su preocupación por defenderse de los vicios que provocaba el capitalismo en la clase trabajadora.

Pero hoy tuve una alegría. Fue cuando leí los extractos del libro de Mariano sobre Darío Santillán, que salió en la revista 23, en la parte dónde cuenta que siempre quería saber sobre los compañeros que militaban desde los setenta y en especial, la parte donde cuenta que no tomaba alcohol cuando trabajaba, para dar el ejemplo a los compañeros, y entonces me acordé de todo este tema. Me dije: ese hecho, pequeñito y grande a la vez, tiene una importancia inmensa. Entonces me animé a escribir. Y me pregunté: ¿cómo se comportarán en el futuro los militantes que dicen “hagamos como Darío Santillán”, ¿lo harán tomando alcohol y fumándose un porro delante de los compañeros?.

Por naturalización nomás, como la juventud consume marihuana, de a poco vamos aceptando de a poco, deshilachándonos, empezamos a participar en una marcha por la legalización, después aceptando que nuestros compañeros consuman en los festivales y marchas. Después pinta una banderita y después otra. Y si empieza a haber solidaridad de las provincias, ¿por qué no vamos a las marchas provinciales también, no?...

¿Después de eso que sigue? ¿ Terminaremos enseñándoles a nuestros hijos desde pequeños a plantar para que sean más libres y fumen de la suya?... ¡Claro!, ¡que es para mejor combatir el Narcotráfico!... ¡Ja!...

Y como si se tratara de un micro-emprendimiento más... Ayer decíamos “ahora nosotros hacemos nuestro pan”... ahora hacemos nuestra droga, ¡somos "independientes" del sistema!!!... ¡Somos unos vivos bárbaros!!!...

Tenemos las guardias tan bajas que los compañeros de Marcha, involuntariamente y por desconocimiento, le publicaron una nota a una ONG mantenida por la fundación de George Soros, como mínimo desde el 2008. Esta fundación tiene la política en toda América Latina de subsidiar oenegés que están por la legalización y la llamada “reducción de daños”, fomentando el consumo de la tan preciada mercancía que “libera” cerebros. Millones de dólares para que se consuma marihuana. ¿Porqué será que de esto no hablan los que con argumentos militantes hoy van a marchar para combatir a los narcotraficantes y a la policía?. Como no creo que Soros quiera luchar contra el imperialismo ni las empresas y países interesados en este negocio, estaría bueno desconfiar de sus intenciones ( Nota en Marcha a Graciela Touzé de la ONG "Intercambios" (  http://www.intercambios.org.ar/, que es la representante en el país de la Open Society Foundations de George Soros (http://www.soros.org/about).

También ex-presidentes latinoamericanos y Vargas Llosa andan planteando que "como fracasó la lucha contra el narcotráfico, lo mejor es legalizar el consumo". ¡Qué mentira!, ¡qué forma de instalar una premisa equivocada!!!... ¿Alguien cree sinceramente que los ejércitos y las policías de algún país lucharon en algún momento contra los Narcos?. México tiene que cambiar cada año toda la cúpula policial porque rápidamente se asocian a los narcos y terminan haciendo , lo que hacen en todo el mundo: son socios del negocio, con los jueces y los punteros políticos, con los “barras bravas” y toda esa lacra que produce esta sociedad que quiera hacer plata a cualquier costo, a la que no le importa destruir la cabeza de cualquiera ni construir ninguna subjetividad liberadora. O mejor dicho: precisamente porque le importa, para evitarla.

Como estudiante del profesorado de Historia, justo estoy estudiando, lo que hicieron los ingleses después de más de 3 siglos de querer penetrar en China, que tenía una economía super-cerrada. Al fin lo lograron (y se quedaron un siglo). ¿Saben cómo?... metiendo de contrabando durante el siglo XVIII opio de la India británica. El opio fue un aliado fundamental para quebrar la resistencia china. En 1830, ante el desenfrenado abuso del opio y las alarmantes señales de degradación en la sociedad china, el emperador ordenó que se combatiera esta plaga, se destruyera lo incautado y se encarcelara a todo el funcionariado corrupto. Inglaterra respondió haciendo dos guerras, derrotó a los chinos, se quedó con Hong Kong, con otras potencias imperialistas se repartieron el país y… el opio fue legalizado.

Últimamente nos congratulamos de las diferencias de América Latina respecto del resto del mundo, de los movimientos sociales, del rol del sujeto, de procesos que se viene dando en respuesta a las políticas neoliberales,  de las experiencias que se están haciendo y de la preocupación del imperialismo por derrotarlas…

Yo no iría tan alegremente a marchas que pueden estar siendo auspiciadas por nuestros enemigos, contribuyendo con sus políticas de control social al sucumbir ante los cantos de sirena de falsas liberaciones. Primero discutiría políticamente, estudiaría qué hicieron  por ejemplo en Cuba o en Venezuela (es muy interesante ver la posición de la secretaría de lucha contra las drogas de Venezuela y sobre todo lo que opina de la marihuana el gobierno bolivariano, así como las campañas que se están haciendo en las escuelas y en los barrios,  se puede ver todo por internet).

No tengo las respuestas, es posible que seamos minoría los que tenemos esta posición, pero insisto en que tenemos que reflexionar antes de que sea tarde. Creo que en este tema caminamos alegremente –con una acitud No Problem- hacia el abismo, hacia una sociedad que es lo opuesto a una sociedad libre, porque estamos hablando de sustancias que destruyen la voluntad del ser humano y sus relaciones personales. Aunque sólo se tratara de sustancias que sólo lo distraigan de la tarea de luchar por una sociedad de iguales, si podemos impedirlo, tenemos que dar esa batalla.

En principio, yo no perdería el tiempo discutiendo entre nosotros, porque estamos en contra la criminalización del que consume. Tampoco en discutir con los compañeros que consumen, ni con los pibes de los territorios y los barrios donde estamos. Al menos no empezaría por ahí, porque es muy complejo el problema y no se resuelve por decreto: todos sabemos que el adicto al tabaco, por más que sabe que se está cagando la salud, que se está produciendo muy probablemente cáncer o problemas cardíacos igual fuma, es una adicción que lo domina. No hay argumentos que puedan contra eso, ni políticos, ni humanitarios ni de ningún tipo. Allí hacen falta otras respuestas que sólo pueden dar los especialistas en adicciones.

El tema es qué le decimos a los que todavía no cayeron en el consumo. Ahí sí podemos hacer algo ya. Con los que están viendo qué onda, quieren probar pero tienen dudas, con los chicos que ahora van a empezar a ver por todos lados situaciones que promueven el consumo de drogas y la actitud de que está bueno consumir porque supuestamente es parte de la lucha contra los narcos - y según algunos ¡hasta es revolucionario!-…. Tenemos la obligación de decirles otra cosa que los medios, que la propaganda oficial, que los políticos demagogos. Para contrarrestar  la política que se está instalando, para preservarlos y preservarnos.

Ya están bajando los programas para las escuelas que hacen promoción del consumo. Y no sólo de la marihuana, de todas las drogas. El eje es la “reducción de daños”, o sea: “consuman, que los vamos a cuidar para que no se mueran... para seguir vendiéndoles la mercancía… Claro que puede fallar, pero en ese caso serán sólo resultados no buscados, efectos colaterales"…

En una escuela secundaria de La Matanza ví el cartel que va en el adjunto (sin la propaganda de la Fede, claro). Saquen sus conclusiones.
También mando lo que está bajando el gobierno en las escuelas. No es casualidad, esto es una política discutida e impulsada. Y este gobierno es totalmente responsable de ella.
En los barrios, en los territorios, en las escuelas primarias, secundarias y en las universidades, en todo lugar donde tengamos presencia política, nuestro trabajo tiene que estar dirigido a prevenir y ayudar a los que no consumen, para que puedan decir “No”. ¡La presión para que digan “sí” es muy grande!.  Tenemos que discutir que les vamos a decir a esos chicos, a nuestros hijos, si queremos ser realmente una alternativa que presente a la sociedad un cambio verdadero. Las respuestas seguro que no las vamos a encontrar en THC.

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